Para quienes no están familiarizados con la vida en una isla, podría parecer que vivir en un destino vacacional se trata solo de relajación. Pero, al igual que cualquier persona en ciudades no turísticas, también tenemos trabajos, sentimos estrés y llevamos el día a día. Claro, tenemos la suerte de terminar nuestros días relajándonos en la playa o en jardines campestres con vistas al mar. Dicho esto, cuando realmente necesitamos desconectar de la rutina diaria, nuestra hermosa isla hermana, Formentera, está a solo un corto trayecto esperando ser explorada. Me encantaría compartir los planes favoritos de nuestra familia para garantizar que una breve estancia familiar en Formentera valga la pena.
Olvídate de alquilar un yate caro: compra billetes para el ferry rápido. Lo divertido es que incluso llegarás al puerto de Formentera, “Savina”, más rápido que esos lujosos yates. ¡Puedes saludarlos desde la cubierta superior mientras los niños disfrutan viendo las olas pasar! Eso sí, revisa el pronóstico del tiempo, porque si es un día muy ventoso, el mareo podría convertir este viaje en una experiencia completamente distinta (mejor no entro en muchos detalles ;)). Con el descuento para residentes, el billete de ida y vuelta cuesta unos 12 euros. ¿No eres residente oficial? Visita Groupon.es y busca Balearia; hay cupones con hasta un 60 % de descuento durante todo el año.
Al llegar al puerto, verás todas las tiendas de alquiler de bicicletas a un paso de distancia. Nuestro lugar favorito para alquilarlas es “Moto Rent Mitjorn”, aunque los precios no varían mucho entre las tiendas. Así que puedes entrar en cualquiera para ver cuál tiene suficientes asientos para niños. El primer plan es pedalear hasta nuestro destino favorito: Es Pujols, un vibrante pueblo costero. La ruta en bicicleta es sencilla y pintoresca: consulta mi mapa aquí para la ruta. Primero pedalearás junto al mar, por un sendero seguro entre las dunas, antes de llegar a la impresionante zona de las Salinas, conocida por su producción de sal y sus lagos de tonos rosados. Estos lagos adquieren su color único gracias a un alga especial, convirtiéndolos en un espectáculo mágico tanto para niños como para adultos. Aunque hay un tramo corto donde tendrás que pedalear por la carretera principal, no te preocupes: los conductores en Formentera están acostumbrados a las bicicletas y la isla limita el número de coches para garantizar un ambiente más seguro y tranquilo.
Dónde hospedarse en Es Pujols
Una vez en Es Pujols, siempre nos alojamos en nuestro hotel favorito, Sa Volta. Es un negocio familiar, a pocos pasos de la playa y convenientemente ubicado en el centro del pueblo, con un parque infantil justo enfrente. El hotel cuenta con un encantador bar y restaurante típico español en la planta baja, que ofrece un delicioso desayuno buffet y a la carta, además de snacks y comidas durante todo el día. ¿El verdadero punto destacado? La terraza en la azotea. Con una gran piscina, jacuzzi y vistas panorámicas de Formentera, es difícil creer que sea un hotel de tres estrellas. Las habitaciones son amplias, limpias y la mayoría tienen bañeras y balcones privados, perfectos para familias. Además, es increíblemente asequible y está gestionado por una familia encantadora, lo que lo convierte en una gran elección.
Qué hacer en Es Pujols
Es Pujols combina diversión y sabor en un ambiente relajado. Uno de mis lugares favoritos es un nuevo chiringuito que reproduce éxitos de los años 70 a los 90. El personal, con un toque único, te pone un sello de purpurina en la cara al pedir una bebida. ¡Una movida inteligente porque los niños no paran de pedir más para recibir esa divertida pintura facial! Para cenar algo asiático, visita China Town Lounge & Sushi, el mejor lugar de fusión japonesa/china en las Pitiüses. La comida es fresca, económica, y los crujientes pancakes de pato son simplemente espectaculares.
Un paseo por la playa te lleva al Chiringuito Nuu, un relajado bar de playa donde puedes disfrutar de cócteles mientras admiras la arena rosa suave y el vaivén de las olas. Justo al lado se encuentra la parte más tranquila y encantadora de la playa de Es Pujols.
Ruta de regreso: Sant Francesc y más
De regreso, recomiendo cambiar la ruta para pasar por la capital, Sant Francesc, y tomarte un tiempo para explorar la historia de Formentera. Retrocede en el tiempo visitando la iglesia parroquial de Sant Francesc, construida en 1738 como una fortaleza contra los ataques piratas. Cerca, la capilla de Sa Tanca Vella, que data del siglo XIV, es un pequeño tesoro histórico que refleja los primeros días de la isla.
Además, Sant Francesc tiene encantadoras boutiques y si te apetece comida italiana, El Gioviale es una opción fantástica para disfrutar de auténtica pasta servida en sartenes familiares para compartir. Honestamente, puedes entrar a casi cualquier restaurante aquí y encontrar comida deliciosa. El Hotel & Spa Es Marès es otro punto de encuentro popular durante todo el año, especialmente para los locales que disfrutan de sus vinos y cócteles en coloridos atuendos.
Sant Francesc es la manera perfecta de relajarte y sumergirte en la vibra especial de Formentera antes de regresar a Ibiza. Después, es solo un corto trayecto de 10 minutos en bicicleta de vuelta al puerto, ideal para disfrutar de ese último ejercicio en la naturaleza. Especialmente porque el ciclismo en Ibiza suele ser más exigente.
Con todos sus rincones encantadores, Formentera es la escapada ideal para recargar energías y escapar del bullicio de la vida diaria en Ibiza. ¡Nos vemos allí la próxima vez! 🌴